viernes, 21 de septiembre de 2012

VEJEZ

¿Qué es el envejecimiento?

El envejecimiento es una más de las etapas del ciclo vital, junto a la infancia, la adolescencia y la edad adulta. Y, en esta etapa, al igual que en las anteriores se producen una serie de cambios físicos, psicológicos y sociales, si bien no se producen en el mismo momento y grado en todas las personas mayores, ya que se trata de un proceso dinámico, de tal forma que el envejecimiento tiene diversas trayectorias. En esta etapa no sólo se producen pérdidas, sino que hay funciones o capacidades que mantienen su actividad o incluso pueden llegar a mejorar. Existen tres tipos de envejecimiento: el envejecimiento normal, el patológico y el envejecimiento óptimo o satisfactorio.

¿La población de personas mayores es homogénea?

Como se ha comentado anteriormente, el envejecimiento es un proceso dinámico, no es estático, de manera que el ritmo al que envejece cada persona es diferente, siendo la característica que mejor define a este grupo de edad la heterogeneidad, mostrando una gran variabilidad tanto interindividual como intraindividual.
 

¿Qué es la variabilidad interindividual?

La variabilidad interindividual implica que a medida que se envejece las personas tienden a ser más heterogéneas, más distintas unas de otras en el funcionamiento psicológico, fisiológico o social, debido entre otras cosas a factores biológicos (genéticos, hereditarios) o biográficos, como por ejemplo, el estilo de vida (actual y pasado) a lo largo del ciclo vital. De manera que, las personas mayores presentan más diferencias entre sí que una muestra comparable de personas más jóvenes. Y, además, los cambios que se producen asociados al envejecimiento no tienen porqué aparecer en el mismo momento y grado en todas las personas mayores (por ejemplo, las diferencias en el encanecimiento del pelo, pudiendo encontrarse diferencias interindividuales tanto en el momento en el que comienza a producirse como en el grado en que se produce el cambio de color, pudiendo ser más o menos blanco), pudiendo manifestar algunas personas mayores más o menos cambios que otras.

¿Qué es la variabilidad intraindividual?

Del mismo modo que en el caso anterior, esta mayor heterogeneidad también implica que si, en una persona mayor, se producen cambios en una determinada función, conducta, capacidad, habilidad psicológica o fisiológica (como por ejemplo la movilidad) esto no significa que se tengan que producir, necesariamente, cambios en otras (como por ejemplo, la capacidad cognitiva), demostrándose que los diferentes sistemas del cuerpo de una persona también envejecen a un ritmo distinto. Más aún, incluso para un mismo tipo de función o sistema, el envejecimiento puede mantener patrones diferenciales para subfunciones diferentes (por ejemplo, memoria e inteligencia).

¿Qué es el envejecimiento normal?
El envejecimiento normal, o primario, implica una serie de cambios graduales biológicos, psicológicos y sociales asociados a la edad, que son intrínsecos e inevitables, y que ocurren como consecuencia del paso del tiempo (por ejemplo, el encanecimiento del pelo). Debe diferenciarse del envejecimiento patológico, aunque a veces es muy difícil establecer la diferencia entre ambos.

¿Qué es el envejecimiento patológico?

El envejecimiento patológico o secundario, se refiere a los cambios que se producen como consecuencia de enfermedades, malos hábitos, etc., y, que no forman parte del envejecimiento normal (por ejemplo, cataratas, enfermedad de Alzheimer) y que, en algunos casos pueden prevenirse o son reversibles.

¿Qué es el envejecimiento óptimo?

Es el envejecimiento que tendría lugar en las mejores condiciones posibles (físicas, psicológicas, sociales) , teniendo en cuenta los múltiples factores que intervienen en el proceso del envejecimiento. Es el envejecimiento deseable por todas las personas ya que implica pocas pérdidas o ninguna e incluye una baja probabilidad de presencia de enfermedades.
El envejecimiento satisfactorio lo obtienen aquellas personas mayores que favorecen la promoción de su salud (física y psicológica), fomentando su autonomía, mediante la práctica de ejercicio físico o el entrenamiento de sus capacidades cognitivas, mejorando su autoestima, manteniendo hábitos de vida saludables, etc., de forma que eviten, en la medida de lo posible la dependencia y el aislamiento con el establecimiento, por ejemplo de redes sociales. La puesta en práctica de estos aspectos influirá, como consecuencia, de forma positiva en su calidad de vida haciendo posible que se encuentren en las mejores condiciones físicas, psicológicas y sociales, experimentando por tanto, un envejecimiento óptimo.



Una nueva etapa del ciclo vital

Al igual que la niñez, la adolescencia y la adultez, el envejecimiento forma parte de nuestro ciclo evolutivo, y como en cada etapa, existen buenos momentos y crisis.

Cuántos dicen: ¡Buena señal, si llegamos a viejos!, sí en eso estamos todos de acuerdo, pero la vejez hay que saber afrontarla y vivirla de la manera más digna posible, y ahí es donde la familia forma un papel crucial.

Como hemos mencionado anteriormente, depende de la forma de envejecer que tengamos, si normal o patológica, la familia se debe de encargar de tomar unas decisiones u otras.

Si el anciano es autónomo e independiente, muchas veces le toca asumir roles que no le corresponderían, como el cuidado y educación de sus nietos, aunque en ocasiones para ellos es una manera de seguir sintiéndose útiles, y desarrollando una función dentro del sistema familiar.
Pero, al contrario, si el anciano envejece de forma patológica, ha perdido su autonomía, y su calidad de vida depende de terceros, es cuando se deben tomar las decisiones más difíciles.
¿Lo cuidamos en casa o buscamos algún recurso?, ¿Qué haría él/la en mi lugar?, ¿Estaré haciendo bien?, ¡Nadie lo podría cuidar mejor que yo!, ¿Lo estaré abandonando?, ¿Qué dirá la gente con todo lo que mi padre/madre ha hecho por mí?.

Estas son algunas preguntas o dudas que pueden pasar por la cabeza de alguien que se ha convertido de hoy para mañana o a lo largo del tiempo, en CUIDADOR PRINCIPAL.



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